viernes, junio 09, 2017

GOD SAVE THE QUEEN

A la hora de terminar estas líneas Teresa May acaba de anunciar, a la salida de su encuentro con la reina en el palacio de Buckingham, la formación de un nuevo gobierno que llevara el Brexit (sic) a buen puerto. ¿Apuesta perdida la suya? ¿Cuándo dejará de mentir e intoxicar y desinformar la prensa global? Una salvedad honorable -nobleza obliga-, los españoles de la City -a razón de veintiuno contra dos- apostaron por Teresa May en la vísperas electoral
¿Bofetada, apuesta perdida la de Teresa May como nos lo viene vendiendo los medios “urbi et orbe” y en especial los medio españoles en las últimas horas? ¡A otro perro con ese hueso! Pierde la mayoría absoluta por sólo ocho escaños (ocho) de diferencia y salva el pellejo no obstante (un decir): mientras escribo esta líneas se encuentre efectivamente en Buckingham Palace de donde saldrá (sin sorpresas) encargada -por la reina- de formar u n nuevo gobierno con la ayuda de los diez diputados (diez) unionistas de Irlanda del Norte, partidarios del Bréxit por supuesto.

Y lo que es más, y mas importante de todo, el vuelco “a la española” que todos o csi todos en los medios patrios daban por cantado y ya acariciaban no se habrá producido. El síndrome electoral “11 de marzo” es por lo que se ve un producto “typical spanish” “Spain is different”, siempre igual, "devant l'éternel” (ante/el/altísimo)

Los ingleses en sus mayoría habrán concluido serenamente con la flema británica y sangre fría que les caracteriza que a las victimas del puente de Londres y de otros atentados anteriores los habrán asesinado a sangre fría y en circunstancias tan macabras los que todos sabemos, y no se habrán equivocado a la hora de tirar la piedra o de señalar con el dedo como muchos españoles lo hicieron (tan trágica e ignominiosamente) en el 2004. Y como habrán seguido ahora haciendo algunos de ellos tratando de echar el muerto a la primer ministro británica y a su gobierno de la desdichada suerte de nuestro compatriota Ignacio Echevarría, al que -si se les oye- no habrán dado muerte (cobarde y vil) sus asesinos sino Teresa May y sus ministros. Como lo oyen.

Autoridades legitimas -entre paréntesis- de un país que había dado (generosamente) parada y fonda -y más- a nuestro heroico compatriota. Quien no es agradecido no es bien nacido, reza el refrán castizo. Y de verdad que el espectáculo de ingratitud, flagrante y escandaloso -made in Spain?- que me fue dado contemplar por parte de muchos los treinta años que llevo residiendo por cima de los Pirineos, me daba ganas a veces de echar mi DNI a los puercos, y era por la marca anti-europea -anti-belga en el caso que nos ocupan- que tantos de esos desagradecidos imprimían invariablemente a sus protestas o alardes de patriotismo, que en mis oídos sonaba fatalmente a guerracivilismo (recalcitrante e irreconciliable) y no a otra cosa.

Y me fui ayer a la cama de madrugada ex profeso -humildemente lo confieso- sin colgar la entrada diaria a la que tengo acostumbrado a los lectores de mi blog por no tener ganar de soportar esa interminable guerra de nervios que nos infligen los medios en España y sin duda en los demás países la prensa global a cada cita electoral importante en nuestros países occidentales. A titulo de botón de muestra, el ABC fuera de toda sospecha -había parado por su cuenta y riesgo el recuento electoral del Reino Unido, durante más de media hora- cuando el marcador andaba a diez contra veintidós a favor de los laboristas.

Al final, el milagro -en rojo- que nos anunciaban no se produjo, y los podemistas españoles y compañeros de viaje tuvieron guardar sus botellas de champan -o de vinazo de Vallecas- para otra ocasión más propicia. Que les sea leve. God save the queen

1 comentario:

Anónimo dijo...

http://jmalvarezblog.blogspot.com.es/2017/06/oh-ese-bandido-peligroso.html#more


http://xulio89.blogspot.com.es/2017/06/jm-alvarez-oh-ese-bandido-peligroso.html